Spa Balance

 

En el sector de productos de belleza es normal ver como las nuevas tendencias vienen y van pero esa tendencia, que ha cobrado fuerza en los últimos años, parece a haber venido para quedarse: los cosméticos creados para adolescentes.

 

Según estudios de Experian, una empresa dedicada a la investigación del mercado, en 2005 la edad media entre las adolescentes para empezar a utilizar productos de belleza era los 17 años. Ahora es 13,7! Pero eso no es todo, entre las niñas de 6-9 años un 43% usa barras de labios, 38% productos capilares y un 12% utiliza otros productos cosméticos.

 

Esa tendencia se ve alimentada en partes por madres trabajadoras ya que quieren pasar más “tiempo de chicas” junto a sus hijas y enseñarles los productos y trucos de belleza con el fin de fomentar su autoconfianza. Estos momentos de “princesa” contribuyen mucho para que las adolescentes estén obsesionadas con su aspecto físico junto a la mala influencia de los medios de comunicación.

 

Las nuevas líneas de productos para adolescentes han llenado el mercado. Las chicas celebran sus cumpleaños con fiestas tipo spa, con manicura, pedicura y tratamientos faciales. Los salones de belleza y también los spas ofrecen menús de tratamientos y productos para las adolescentes. Viendo las muchas oportunidades que brinda esa tendencia parece asegurado que las compañías seguirán invirtiendo en este rentable sector. También los spas podrían beneficiarse de este nuevo segmento del mercado. Las madres, buscando centros – en su domicilio o en sus vacaciones – que permiten que sus hijas disfruten de la misma spa-experiencia como ellas. Ofrecerles paquetes, fiestas y productos a los adolescentes en hoteles, spas y cruceros es una estrategia necesaria y en auge.

 

El mercado de los productos para adolescentes seguirá en el futuro el mismo camino que el mercado de adultos, centrados cada vez más en productos naturales y ecológicos. Las jóvenes tienen aun más cuidado con los productos que utilizan para cuerpo y cara. También las madres quieren asegurarse que los productos utilizados por sus hijas (con una piel joven y delicada) no tengan ingredientes químicos que puedan dañar la piel.

 

Puede que nadie sea demasiado joven para aprender la rutina de una buena higiene diaria y la importancia de cuidar bien la piel. Los productos cosméticos, aunque puede parecernos bien o mal, ya forman parte de la cultura de los adolescentes. Y una cosa es segura: a la industria de belleza le parecerá bien.

 

Fuente:  Spa Business: “Youth and Interesting Statistics”